Pontevedra olvida los incendios del 2006 con su primer parque forestal
Se ha creado una nueva senda de 3,5 kilómetros que rodea al embalse,
zonas de esparcimiento y varios miradores
El entorno del Pontillón de Castro renace gracias
a la plantación 1.300 árboles en un área de 13 hectáreas
Superar el desastre medioambiental que supusieron los incendios del 2006 fue uno de los objetivos con que nació el plan Monte Vivo, una iniciativa del Concello que perseguía la rehabilitación de 800 hectáreas arrasadas por el fuego. El trabajo de los dos últimos años comienza a dar sus frutos, y Pontevedra contará muy pronto -en el plazo de de un mes- con su primer parque forestal.
Con una inversión de 590.000 euros, ese primer parque se encuentra en el entorno del embalse del Pontillón de Castro y el llamado Outeiro do Castro. En total se ha rehabilitado una superficie de más de trece hectáreas con la plantación de 1.300 árboles de 22 especies diferentes, todas ellas autóctonas y propias de un hábitat de ribera. Y todas caducifolias, tal y como marca el proyecto Monte Vivo, que apuesta por este tipo de especies como idóneas para para crear cortafuegos naturales y evitar la propagación de incendios forestales.
Antes de proceder a la plantación, se realizaron en la zona tareas de retirada de la madera quemada por aquella oleada de incendios, así como un tratamiento especial del suelo para garantizar que los nuevos ejemplares prendan.
El parque forestal se completa con una serie de actuaciones encaminadas a facilitar la estancia en la zona. Desde la creación de senderos por el monte y por el borde del embalse -esta última senda tiene 3,5 kilómetros de longitud y permite rodear la balsa de agua-, hasta la habilitación e zonas de estancia. En el propio embalse, donde habrá puestos para pescadores, un área de juegos y varias con bancos; y en el Outeiro do Castro, en donde se han rehabilitado fuentes y mesas y bancos de piedra, y se ha creado también un parque infantil con elementos de madera. Asimismo, se han creado varios miradores sobre el embalse y se reconstruyó un puente de piedra que había sido derribado por una riadas.
El parque estará totalmente finalizado en el plazo de un mes. Según señalaron fuentes de la empresa Naturgalia, faltan algunos pequeños remates, como aportar zahorra a la senda, instalar la iluminación o proceder a una hidrosiembra de las zonas de estar.
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